Tal y como comentábamos en el post anterior, el concurso de Banco Madrid está generando discrepancias entre su Administración Concursal y la CNMV, en concreto respecto al tratamiento de determinados fondos como activos del concurso. Para evitar la inclusión de estos en la masa del concurso la CNMV ha optado por declarar en insolvencia a Interdín y presentar su preconcurso.

Esta comunicación de insolvencia, una vez se declare el concurso, permite que sea el Fondo de Garantía de Inversiones (Fogain) el que cubra hasta 100.000 euros por titular, en lugar del Fondo de Garantía de Depósitos.

Desde que se declaró el concurso de acreedores de Banco Madrid, los fondos correspondientes a los clientes de Interdin se vieron atrapados en la cuenta corriente existente en la concursada.

Si bien el Fondo de Garantía de Depósitos iba a cubrir hasta 100.000 euros por cliente, la situación se complicó ante la comunicación de la Administración Concursal sobre la imposibilidad de individualizar los saldos de los clientes. Esto supondría que sólo habría derecho al recobro de 100.000 euros por cuenta, es decir, a repartir entre todos los clientes de Interdin, ante la existencia de un único titular.

La CNMV ha manifestado de forma persistente que la posición de la Administración Concursal suponía el incumplimiento de la Ley de Mercado de Valores.

No obstante, para solventar las dificultades que ha supuesto el concurso de acreedores, la CNMV ha optado por una vía alternativa: reconocer la insolvencia de Interdín para permitir  que entre el Fogain.

La finalidad del Fogain es ofrecer a los clientes de sus entidades adheridas la cobertura de una indemnización en caso que alguna de estas entidades entre en una situación de concurso o declaración de insolvencia por parte de la Comisión Nacional del Mercado de Valores.

Por ello, la CNMV ha optado por comunicar la situación de preconcurso de Interdín, para garantizar el cumplimiento de la Ley de Mercado de Valores, y devolver los ahorros a sus clientes, hasta un máximo de 100.000 euros. En la práctica supondrá reintegrar el dinero a casi todos los clientes, salvo a 14 de ellos, cuyos saldos exceden dicho umbral.